Por Mariana Brizi

inspiraciónCuando queremos marcar la diferencia, lograr que nuestra empresa se destaque y alcance resultados superadores, lo que necesitamos son ideas creativas que rompan el molde. ¿Cómo hacemos para conseguirlo? ¿Invocamos a las musas inspiradoras o ponemos manos a la obra?

 

Hay quienes confían en la inspiración como recurso creativo, y quienes creen que “La inspiración te encuentra cuando estás trabajando”. Para llegar a generar ideas disruptivas, innovadoras, que nos ayuden a marcar la diferencia podemos buscar el momento ideal donde “las luces se enciendan” y aparezca la magia, o bien podemos ir por otro camino, y hacer que esa luz se encienda a fuerza de intentar e intentar, buscar y conectarnos una y otra vez con el trabajo de manera insistente.

 

La inspiración como una fuerza poderosa que nos envuelve es una idea algo romántica pero a la vez muy real que muchos artistas o escritores experimentan cuando se proponen “crear”. Algo así como un estímulo exterior que acapara su mente, una intensidad creativa que, si la atendemos con dedicación, nos ayuda a producir ideas realmente reveladoras y creativas. Para lograrlo, estas personas se nutren de estímulos exteriores y buscan recrear permanentemente su mirada, desarrollando una gran capacidad de observación y a la vez una actitud introspectiva.

Sin embargo, hay otras personas que consideran que la inspiración es un mito, que esta fuente de creatividad es en realidad el fruto de un ejercicio cotidiano de concentración y búsqueda, ensayo y error, hasta dar con las ideas más acertadas.

En el arte, como en otros trabajos menos bohemios y más racionales, lo cierto es que siempre necesitamos una dosis de “magia”, de creatividad y distinción para que nuestro trabajo salga de la monotonía. No importa cuál sea tu técnica, lo importante es reconocer que necesitamos un espacio abierto a la creación, que hagamos lo que hagamos siempre es bueno tener un tiempo para “jugar” y ver nuestras tareas cotidianas desde otro lugar. Solo así podremos cambiar de perspectiva, encontrar otro ángulo, y resolver las tareas de todos los días de manera diferente y creativa.

Este es el desafío que hoy te dejamos ¡animate a intentarlo!… y luego nos contás los resultados que la creatividad sumó a tu trabajo.