Todos compramos motivados por alguna emoción, ¿Te habías puedo a pensar en eso?
Si tenés dudas, recordá alguna compra reciente que hayas hecho. Identificá los motivos que te llevaron a concretarla. Quizás haya algo de “lo necesitaba”, pero también seguro intervino un gran componente de “me entusiasmó”, “me hizo sentir bien”, “me tenté”, “era una oportunidad”, y miles de etcéteras relacionados 100% con lo emocional.
¿Por qué te decimos esto? ❓
Porque está comprobado que compramos con la intención de cambiar en algún sentido nuestras vidas o mejorarlas.
Y acá es donde aparece la GRAN OPORTUNIDAD para tu negocio: el éxito está en manos de los que entienden que el foco de toda comunicación está en centrarse en la solución; para qué te sirve lo que te ofrezco, qué cambios vas a sentir al tener este producto/servicio, qué solución vas a recibir, de qué manera vas a cambiar tu vida
Ahí, ¡justo ahí!, se produce la magia de la persuasión, de la conquista… ¡del amor por tu marca!
Muchas veces estamos tentados a hablar de “quiénes somos”, de por qué hacemos lo que hacemos, de qué geniales que son nuestros productos. Sin embargo la vuelta de tuerca de toda comunicación exitosa es esta: contarle a tu público de qué manera ese producto/servicio le va a cambiar la vida, le va a ahorrar un dolor de cabeza, le va a solucionar algo que desde siempre lo estuvo preocupando…