Por Mariana Brizi
¿Sentís que te la pasás comunicando y no conseguís resultados?, ¿te gustaría atraer más consultas y convertir a tus “seguidores” en clientes?
Bueno, estás en el punto exacto en el que se encuentran tantas otras personas que invierten muchísimo tiempo y esfuerzo en generar comunicaciones de lo más diversas… pero no ven resultados tangibles que mejoren el rendimiento de sus negocios.
Porque, al final de cuentas, todos queremos genera más ventas, porque las comunicaciones no son un fin en sí mismo sino un medio para alcanzar resultados. ¿Cuál es el error que cometen aquellos que no logran vender sus productos/servicios a pesar de comunicar constantemente?
Por empezar, comunicar sin un plan o una estrategia hace que tus comunicaciones no tengan realmente un “rumbo” y sean solo piezas aisladas que no “cierran el circuito”. Por eso, el copywriting te ayuda a ESCRIBIR CON RUMBO, es decir, enfocado hacia objetivos. Así sea que tu negocio requiera más presencia digital o incluso analógica, el contenido estratégico es lo que te ayudará a lograr conversiones… ¡Y VENTAS!
Por eso, para empezar a reorganizarte, te sugerimos incorporar a tu rutina de contenidos digitales (y analógicos, ¡¿por qué no?!) las siguientes recomendaciones, que seguramente reenfocarán tus pasos y te ayudarán a sacarle más rédito a todo el esfuerzo que estás haciendo:
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–> Creá contenidos que le hablen a tus clientes. Y no digas que “mi producto o servicio es para todos” ¡No!, si le hablás a todos, probablemente no le estés hablando a nadie en particular. Y entonces serás uno más… y pasarás desapercibido. Antes de crear un mensaje debés tener una idea lo más clara posible de quién es tu cliente ideal y a qué tipo de personas les estás hablando.
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–> Definí a quiénes querés llegar con tus mensajes. Sólo así tus comunicaciones serán efectivas. ¿Ya te revisaste quiénes son actualmente tus seguidores? ¿y si provás reorientando tu tono y estilo de comunicación en función de hablarle realmente a tus potenciales clientes?
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–> Elaborá un calendario de comunicaciones con una continuidad estratégicamente planeada: semana a semana, mes a mes, lo importante es que vos tengas pleno control de qué estás diciendo, cuándo y cómo. ¡Y que puedas sostenerlo en el tiempo! Recordá que un período mínimo de trabajo ininterrumpido para evaluar resultados, es de 3 meses.
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–> Hacé que tus comunicaciones tengan un hilo conductor, mayor coherencia y, por ende, mejor feedback con tus destinatarios. Evitá ser “polirubro” y hablar de muchos temas, cuanto más foco tengas tus contenidos, más fácil será que los clientes te identifiquen con tu producto o servicio y logren hacerse una idea de lo que pueden conseguir con vos.
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–> Toda comunicación tiene que dejar en claro qué respuesta esperás por parte de quien te lee: ¿Qué comenten? ¿Qué te llamen? ¿Qué aprovechen una oferta? Dejar en claro en cada comunicación este punto, es fundamental para medir los resultados concretos.
Pasito a pasito, como dice la canción, el orden y la claridad en tu comunicación va a ir generando cada vez mejores resultados. ¡Manos a la obra, queridos amig@s y seguidores!
Y si querés seguir encontrando estrategias para potenciar tus resultados, seguí leyendo este post ¡súper recomendado!
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